lunes, diciembre 4

la basurita

Panda, ya escribe, no seas sentido....
EN mi examen de lenguaje, no tuve ninguna falta de ortografía, asi que hoy estoy lleno de felicidad propia y decidí no pasar por word y su apestoso corrector de ortografía este escrito, pues confio casi plenamente(mm) en mi. (del de trigonometría prefiero no comentar más que esto).



-Pues si, yo creo que deberías dejar d epensar en ella, al parecer sólo te ocasiona tristeza.
-Lo sé, pero es inevitable, hasta he llegado a pensar que la quiero como a mi.
-Está bien, perdona el comentario, pero no es necesario que llores...
-No estoy llorando!
-Claro, olvide que orinas en público por los ojos...
-No te hagas el chistoso, es que se me ha metido una basurilla en el ojo izquierdo...

Un parrafo después, la "basurita" lloraba por el calificativo que el escritor y el afectado le habían dado a su existencia. "Tanta maldita arrogancia de ese gignatón... no hay derecho" se decía. "Cree que proque soy pequeña merezco menos respeto que los demás, cree que mi tamaño es sinonimo de mi improtnacia" lloriqueaba como un bebe sin chupon. La criaturita, estaba en verdad desecha, le dolía lo que estaba escuchando como si estuviera enamorada. Mientras el hombre, continuaba maldiciendo:
-Cómo es posible que con su idiotez de tamaño me cree tanta molestia, ¿quien demonios merece joder mi vida de esa manera?
Si la criaturita hubiese podido, habría pedido disculpas, pero era muy penosa para hacerlo. Quería salir del ojo, y dejar d emolestar al hombre, pero era tan pequeña y falta de carácter. Si por ella fuese, incluso desaparecería dela faz de la tierra, sin dejar siquiera la molestia de un ojo "abasurado" en los que la habitan. Entriztesida, y atemorizada de sentir colera por los demás, dejaba que el tiempo pasara, ya vendrá el momento de ser feliz (sollozaba). "no es que la vida sea injusta conmigo, es que me esta guardando un cúmulo de felicidad para hacerle lo que yo quiera. PEro apesar d elo que su boca decía, su alma no lo creía en verdad, sabía que estaba condenada a ser infeliz, y lo único que le quedaba era resignarse. Al poco rato, vio como algo la arrogaba del ojo donde estaba.
Sintió tanto alivio, que hasta respiró un poco de aire(cosa a la que no estaba muy acostumbrada por su desgana). A los pocos sgundos cayo al suelo y se dijo: por fin, he dejado de dañar al mundo, creo que me siento mejor. DEsgraciadamente, como ella bien lo sabía, estaba ocndenada a estorbarle la vista a cuantos seres vivos la naturaleza, con su arbitrariedad y aleatorios procesos, quisiera.

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