martes, julio 12

Arévalo Vive, ¡Carajo!


Lo último que supe de Wolfgang Arévalo luego de su muerte violenta en Friburgo fue la creación de una célula terrorista en Atotonilco y en Puente de Doria. Basado en la reivindicación del cristianismo wolfangiano, dicen ellos, pretenden reconciliar al Estado mexicano con una concepción cristiana de la moral.

Su movimiento supone que Hidalgo debe ser la capital de una insurgencia cristiana que logre determinar el nuevo rumbo de la nación. En su búsqueda, me encontré con un estandarte que se encontraba en una pequeña choza de madera que hacía de tienda en el camino a La Barranca. A continuación lo publico.

¿Dónde estarás viejo amigo?

Raúl Demesio de la Garza García [12/jul/2011]